sábado, 10 de octubre de 2015

La aventura irlandesa de Jordi Juste

Jordi Juste entrena por segunda temporada en Irlanda. Tras hacerlo el año pasado en el Titans Basketball Club tiene ante sí esta temporada de dirigir a las Liffey Celtics BC en la Premier League Femenina. Pese a la derrota en la primera jornada del liga frente a Pyrobel Killester por 89-80 Jordi afronta la temporada con optimismo y así lo comparte con nosotros junto a las experiencias que ha vivido durante una carrera que cumple 20 años esta temporada. Como no, también nos regala un momento musical. 


Estás viviendo tu segunda experiencia en Irlanda ya que el año pasado entrenaste en el Titans Basketball Club, que significó para ti tener esa oportunidad?

Aire fresco, muy revitalizante, eso es lo que recuerdo de ese primer momento posterior a tomar la decisión. Era un momento en que me sentía estancado, con la sensación de no avanzar ni retroceder. Titans rompió el bucle en el que estaba instalado. Una vez allí el reto de entrenar en un país distinto en un idioma diferente y que no dominas siempre da respeto, pero no fue ese un motivo que me generase dudas, al contrario, una oportunidad para aprender inglés, aspecto que creo importantísimo para los entrenadores, salgas o no al extranjero a entrenar, porque a niveles profesionales ya vemos la cantidad de países que hay representados en un equipo. Ya a nivel deportivo, fue un año difícil, no fue una gran temporada para nosotros a nivel de resultados, pero si de mucho aprendizaje y promoción de jugadores jóvenes, objetivo que el club no se planteaba, pero por necesidad primero y por mi afán siempre de contar y dar oportunidades a la gente joven, acabó siendo un aspecto positivo que me consta que esta nueva temporada seguirán desarrollando. Como entrenador también aprendí a que hay que respetar y sobretodo conocer al club donde se llega, el país, parte de su cultura…con el añadido que Titans la temporada pasada llegó a contar con jugadores de 8 nacionalidades distintas, con lo que ya puedes imaginar, que fácil no fue y entretenidos lo estuvimos.


Esta temporada vas a entrenar a las Liffey Celtics, en la Premier League Femenina, ¿Cómo afrontas este nuevo reto?

Con mucho respeto y mi particular “lema” que este año me acompaña, que es el de ir poco a poco. Primero por como llega uno mentalmente a una nueva temporada, no siempre un entrenador se encuentra o siente igual al inicio de cada campaña y segundo por mi reciente experiencia en el baloncesto irlandés, las circunstancias con las que cuenta un equipo de baloncesto en un país, en el que quizá sea el quinto o sexto deporte en importancia y práctica. Por ejemplo a nivel logístico e infraestucturas, tiempo de entrenamiento, personal y staff técnico con el que cuentas. Todos esos factores hay que tenerlos en cuenta. Cuando llegué el primer año me la pegué a base de bien, con lo que conlleva, enfados, no contar con la concentración necesaria y altos niveles de frustración.

Y segundo, respeto también porqué va a ser mi tercera temporada en un senior femenino, llevé un cadete también hace unos años, de las 20 que cumplo este año como entrenador. Dos experiencias distintas, que me enseñaron un grado de dificultad más a la hora de entrenar a chicas. Un primer año con excelente dinámica de equipo pero no pudimos cumplir con el objetivo de resultado y otra totalmente opuesta, un vestuario que se me hizo difícil de llevar y gestionar pero que supimos llegar al tramo final cumpliendo con el objetivo. Sensaciones opuestas. Hay que estar preparado para la gestión de un vestuario femenino y siento profundo respeto y admiración por los técnicos que llevan años haciendo ese trabajo.


¿Qué objetivos te marcas para esta nueva temporada?

Son varios y en distintas áreas. Hay algunos a nivel personal, como seguir mejorando mi inglés, valoraba y mucho seguir en Titans por el tema del inglés fundamentalmente, una especie de inversión a medio y largo plazo y me sentí agradecido de tener esta nueva oportunidad en Dublin para seguir aprendiéndolo. Ligado a este y en lo deportivo, ser capaz de comunicarme mejor con el equipo, especialmente en las charlas, no veas que momento supone para mi en las charlas pre entreno, prepartido o a la media parte!! Nadie sabe lo que paso por dentro!

Pero en términos del equipo poder aportar distintos aspectos del juego que en Irlanda son caros de ver, por desconocimiento, por referencias del baloncesto americano, como es mejorar el juego de pase, de inversión de balón, de uso de las esquinas y algo que me fascina y que considero muy importante debido a que la cancha se está quedando pequeña, como es enseñar los distintos ritmos de juego que podemos desarrollar en un partido y concretamente, esa área comprendida entre las linias de 6,75, un espacio por explotar y para enseñar a ganar ventajas,en mi opinión.

A nivel de resultados el club ha marcado poder clasificarse entre las cuatro primeras y entrar en un playoff de semifinales de Liga y a poder ser pasar una ronda de Cup, cosa que no han conseguido hasta ahora. Pero necesito conocer mejor a mi equipo, los rivales y el nivel de la Premier League para valorar si estos van a ser objetivos razonables o no.


- ¿Qué destacarías de tu plantilla?

Lo primero que me ha hecho sentir joven de nuevo! Pasan las temporadas y hay una en la que te das cuenta que ya nunca más vas a entrenar jugadores mayores que tu. Pues este año así será, tengo dos jugadoras entradas a sus 40 años que me hacen más joven. Pero tendrías que verlas, en un estado de forma envidiable y una gran calidad técnica. Las dos fueron internacionales y esa experiencia y saber hacer, cuidarse y respetar su cuerpo lo llevan muy bien y deberían ser ejemplo para el resto de jugadoras jóvenes que conforman el resto del equipo. Es un equipo muy alto, pero que incomprensiblemente a casi todas les gusta jugar por fuera y con una gran capacidad para anotar de tres puntos. Encontrar el equilibrio y enseñar el juego interior para ser más imprevisibles y aprovechar esa superioridad física también es uno de los objetivos. Corremos mucho el contraataque y quizá nuestro punto más débil es la defensa y en el que tendremos que incidir, pero no tanto para transformar este equipo en un equipo defensivo y aguerrido sinó para aprovechar más rápido todas las virtudes que tenemos en ataque y conseguirlas de manera más rápida y temprana en el juego y también por el simple hecho de trabajar la cohesión de equipo y la comunicación. La defensa te lo permite y asílo vamos a enfocar.



También trabajas en la North Atlantic Basketball Academy, ¿Qué valores son importantes para ti a la hora de formar a jugadores/as?

Debo confesar que a veces soy un poco escéptico a la hora de hablar de valores. Se usan tanto, están en boca de todos y a todas horas, que me aborrece y a veces me enfada. Pero contestando a tu pregunta, hay muchos aspectos a trabajar, enseñar y sobretodo a ejemplarizar y en los distintos niveles de edad las prioridades cambian. Pero principalmente te diría uno fundamental y que reporta en muchos otros:

aprender a escuchar. De ahí derivan otros tan manidos como el respeto, el compañerismo, etc… Y otro aspecto importante para mi es el de crear hábitos fuera de la pista, antes y después, pero también dentro de ella, en plena práctica, hábitos de entrenamiento. El jugador debe llegar a senior, incluso un poquito antes, porqué la demanda es altamente exigente, diría junior, sabiendo entrenar, qué cosas debe hacer como jugador, como se debe preparar, con que grado de concentración y cuanto es capaz de mantenerla, conocerse a si mismo, como jugador y cada día mejorar y ser un jugador entrenable. Este último aspecto creo que todos los entrenadores lo tenemos en los primeros lugares de la lista en cuanto a lo que esperamos y valoramos de un jugador. Porqué cuanto más sencillo y simple, más rápido, divertido y eficiente será el aprendizaje.


Me consta que la formación es una de tus facetas favoritas en tu trabajo como entrenador ¿Qué tiene de especial para ti?

No es que sienta algo especial en particular, cada edad tiene su parte atractiva en lo que se refiere al entrenamiento, a la evolución, los contenidos a enseñar, a individualizar el trabajo, a enseñar el juego de modo colectivo de manera gradual y en función del nivel de los jugadores utilizar unos conceptos u otros. Quizá si sientes la oportunidad de transmitir algo en lo que crees que será importante que tengan como jugadores. Transmitir aspectos también con los que andar por la vida y en los que tu como entrenador crees firmemente y forman parte de tu personalidad. Especial interés suscita el hecho de ir incorporando jóvenes jugadores a equipos de rendimiento y ayudarles en ese paso decisivo y delicado a la vez. Y no siempre aciertas y no siempre has ayudado a un jugador facilitándole el salto al primer equipo. Pero si no arriesgamos no sabremos en que nos equivocamos y en que hay que mejorar, ni descubriremos el paso o los siguientes pasos a dar. Aunque minimizar los errores en este aspecto si adquiere una significativa importancia. Tenemos una gran responsabilidad con esos jugadores jóvenes y en muchos casos en los que nos encontramos día a día, de nosotros depende su continuidad o no en el deporte.


Antes de llegar la oportunidad de entrenar en Irlanda cosechaste varios años de experiencia tanto a nivel de formación como senior en categorías autonómicas. ¿Cuáles son las diferencias más notables que has encontrado al marcharte fuera?

Deberíamos valorar más lo que hay en España, las facilidades de entrenamiento, las competiciones, sus estructuras y organización, al menos en Catalunya son muy importantes. En un país como Irlanda eso no lo encuentras. La cultura del país influye mucho, pero la que más me gusta es el gran valor que le dan al deporte escolar, diría que está mejor organizado y goza de mayor nivel en cuanto a competición que las propias ligas de club. El tratamiento al deporte escolar es algo que en España se fue perdiendo por la ambición de los clubes de acaparar y controlar el mayor numero de jugadores y tener mejores equipos que el equipo vecino. Y otro aspecto positivo es que la especialización no existe en edades tempranas. Eso implica que todos los niños practican al menos tres deportes a la vez, la escuela lo fomenta como ya he dicho y de ahí salen auténticos atletas. En eso son mejores. Luego la calidad técnica se resiente pero tengo mis dudas que sea por la no especialización y si más por el poco interés que genera el baloncesto en un país en el que a cada 5 kilómetros te encuentras verdes campos para la práctica del rugby o del fútbol gaélico o el hurling, deportes Top entre sus habitantes.

Ahora bien, la temporada que tuve la suerte de entrenar en Belgrado, fue única hasta el momento. Si en Irlanda solo te cruzas con campos de rugby, en Belgrado en cada esquina, en cada parque, uno escucha el bote de un balón en una cancha de baloncesto al aire libre y con su infraestructura totalmente cuidada y respetada. De ahí me quedo con la raza del jugador serbio, con su instinto y su ética de trabajo, que importaría para España sin duda alguna.


Cada vez sois más los entrenadores que decidís seguir con vuestra carrera fuera de España ¿A qué crees que es debido?

A que cada vez hay más entrenadores, mejor preparados, la competencia es máxima y los puestos realmente bien remunerados y que te permitan dar el salto al profesionalismo son bien escasos. Llevo mucho años combinando tareas y equipos junto a coordinaciones. Llega un punto que si no te gusta realmente y solo lo contemplas como un medio, puede hacerse especialmente duro el transcurso de la temporada. Fuera he encontrado la oportunidad de poder dedicarme a entrenar que es lo que verdaderamente me gusta y ser remunerado y valorado por ello. Pero para salir también hay que tenerlo muy claro. No todo es simple ni sencillo, hay que valorar y mucho lo que vas a estar dispuesto a sacrificar; cosas que las sabes de antemano, otras que las aprendes estando fuera, en que aprendes a valorarlas justo en ese punto. Irse implica un ejercicio de apertura de mente, asunción de riesgos y no tanto por una cuestión de necesidad; no por lo que se refiere a los que nos dedicamos al mundo del entrenamiento. En otras profesiones, puede que la necesidad si pueda tener una mayor incidencia, pero opino desde la distancia y puede que esté equivocado respecto a ello.

Y hay otro aspecto relacionado con “temas políticos”, entornos, amiguismos, cotos cerrados. Es así, funciona en España y en cualquier otro lugar del mundo y para cualquier oficio, pero a más nivel, más estructura, se magnifica la incidencia de su efecto como es el caso de un país como España, en que estos últimos años está destacando en las competiciones deportivas a nivel internacional y cosechando muchos éxitos.


¿Qué crees que haría falta para cambiar esta tendencia en los próximos años?

Creo que primero debería cambiar el marco mental establecido y valorar al entrenador como una figura crucial y parte de la educación integral que todo niño o niña tiene derecho a recibir. Invertir en la base, seducir al entrenador para que sienta la importancia de su trabajo en esas primeras edades y para seducir hay dos aspectos clave: una estructura de trabajo definida y con objetivos establecidos y dinero. El trabajo se paga y el buen trabajo mucho más.

Pero personalmente no me preocupa que esto no cambie: los entrenadores que estamos fuera creo que estamos instalados en un punto de no retorno, de no mirar atrás, de no lamentarnos por lo que no disponemos en “casa”. Afrontamos ese desafío de entrenar con la mente abierta y dispuestos a todo. No es fácil por supuesto, cada uno se sabe de sus circunstancias personales, de su entorno y los valores o prioridades que le definen pero que siempre van transformándose, en esta larga carrera de fondo que es la vida.

Y para terminar, como sabes este también es un blog de música. ¿Con qué canción te apetece que acabemos la entrevista?

Bruce Springsteen siempre ha estado metido ahí en mis temporadas y en este momento actual, quizá la que me transmite y aporta un valor significativo es la de “No Surrender” cantada a dúo con Brian Fallon

Quiero darte las gracias por acordarte de mi y concederme el privilegio de contar mi experiencia en tu blog y mandar un saludo y abrazo muy grande a todos tus lectores.


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